viernes, 24 de octubre de 2008

SIN QUE SIRVA DE PRECEDENTE

No tengo especial interés en tratar el tema de la Iglesia Católica pero, si quiero comentar algo sobre El Sol, no queda más remedio, pues es una publicación casi monotemática.

En esta ocasión estoy de acuerdo con el editorial Ser españoles y otros orgullos... donde el director critica que nuestros políticos confundan "lo personal (sus creencias), con lo institucional (lo que representan)".

Sólo discrepo en un nimio detalle: la conclusión. Si bien nuestro director cree que los políticos deben asistir a los actos religiosos sin excepción, yo opino justamente lo contrario. Porque son representantes de un estado de derecho LAICO y para eso se les vota. Si el Ayuntamiento debe estar representado en las actividades de las iglesias, o de una asociación o de un club deportivo, se nombra un representante oficial (que sí debe asistir independientemente de lo que crea) y el resto que haga lo que quiera a título particular. Que digo yo que es lo más lógico. A nadie se le ocurre que toda la corporación deba estar en la inauguración de una peña madridista por mucho que sean mayoría.

Y de camino, a ver cuándo el ejército se aplica el cuento (a no ser que sea una actuación pagada), o cuándo desterramos las Biblias de las tomas de posesión de cargos públicos, o cuándo se derogan los funerales de estado, o...

No hay comentarios: